8.11.2010

No, no quería que volvieras a verla, ¿para qué? No quería que al verla volvieras a sentir, nervios, pero al fin y al cabo sentir, porque después de eso vendría la confusión, las preguntas ¿pero qué sentí? ¿por qué después de tanto y de todo ella me vuelve a hacer sentir?... sí, porque después de todo y tanto yo lo sé, nervios ibas a sentir… pero después, después por fin entendí que aquellos nervios son directamente proporcionales al dolor sentido que el tiempo convirtió en incertidumbre, esos nervios que no son más que una ilusión que el tiempo y la distancia destrozó, una imagen borrosa y desconocida, unas lágrimas que se secaron pero quedaron, una tristeza inmensa que quiso superarse, una vida, un amor que en planes se quedó… nervios, nervios de volver a verla, a ella a quien todo entregaste, quisiste darle, soñaste y hoy son solo ideas casi ilegibles, irreconocibles por ti, pero al fin y al cabo tuyas… nervios, directamente proporcionales a esa tristeza, la que te perturbaba, te acorralaba, de enceguecía, te incomodaba, y todo porque querías amarla… Pues mi amor, ve y encuéntrate con ella, vive este momento que por años te ha intrigado, ve y graba ese momento por siempre en tu memoria pues te aseguro, y de eso me encargo, nunca más volverás a sentir eso, entre tú y yo nunca habrá un reencuentro.