3.31.2008

Yo le huyo a mis palabras
Palabras que están tristes
Tristes como este viento
Viento nuevo es el que quiero
Queriendo siempre detener
Detener la tristeza
Tristeza completa
Completa de torpeza
Torpeza porque te recuerda
Recuerdo que no anhelo
Anhelo de tenerte
Teniendo entre mis brazos
Abrazos verdaderos
Verdad a la que temo
Temor en un encuentro
Encuentro con mis palabras
Palabras que están tristes
Tristes como este viento

3.15.2008

AVISO

Este es un aviso para informar que Cosmodelavision ha venido teniendo problemas, razón por la cual se estudia la posibilidad de suspender su actividad por algún tiempo. El cosmos se ha volteado y ella no ha sabido asimilarlo, ha perdido su cabeza y nada que la encuentra. Ha perdido su cabeza, parece que fue algún día donde el sol ya no anunciaba el nuevo día y donde los mortales ya no dormían de noche. Ha perdido su cabeza, en uno de esos días donde el pasado el presente y el futuro eran fácilmente distinguibles, ahora ella se pierde en el tiempo y no logra entender en que punto de su vida se encuentra. El tiempo se ha destruido, y se agobia con la mirada que cada tres minutos acusa al reloj, y sin quererlo al observar el cielo se da cuenta que ya el día esta durmiendo. Día que ayer fue hace una semana, y hace una semana un mes, como si la cabeza la estuvieran utilizando para jugar malabares, alguno de los tantos payasos con los que se ha encontrado. La pobre ha perdido su cabeza, y sus sentimientos suben y bajan cual montaña de Orlando, razón por la cual su espalda se tiempla de los nervios, haciendo del tabaco que comenzó cuatro colillas en el cenicero, y del periódico en su mano un objetivo abandonado. Ha perdido su cabeza y como ya no puede refugiarse en sus pensamientos ahora lo hace en el movimiento rápido y sin ritmo de su pie derecho. Y busca su cabeza en el suspiro que toma con delicadeza, en el respiro que da rápidamente, lentamente, profundo o ligero, logrando simplemente marearse totalmente. Ha perdido su cabeza y no sienta a nadie en el banco de acusados, pues la pobre no recuerda como fue que le hicieron daño. Ha perdido su cabeza y tan solo espera que en alguna de estas noches locas renazca, al acostarse abraza fuertemente la cobija rosada, pero las lagrimas no sirven de agua, la cobija no es fértil, y además no hay semillas a la vista. Ha perdido su cabeza y no sabe como ordenar las noticias que le van dado, entonces se deja llevar en las noches bailando, sonríe con su cuerpo alcoholizado, y pospone para mañana el compromiso para hoy olvidado.

Cosmodelavision esta peligrando pues su dueña ha perdido la cabeza, cada día es mas ella, cada dia inventa una nueva, cada día vive en ausencia, cada ausencia la revive en su alma, no recuerda quien era, mas aun así descubre lo que siempre ha sabido. Cosmosdelavision se despide, por hoy, mañana, el mes o el año , o el tiempo que sea!

Después de verme en el piso y casi sin salida dijo la ultima frase con la que pretendió matarme “no entiendo para que estudias eso, eres muy sensible para asimilarlo”… y dando media vuelta desapareció entre los libros de la gigantesca biblioteca.

Es verdad, soy sensible, pero ojala pudiera encontrarme otra vez a ese espécimen que se encontraba en la sección de América Latina, quien por cobarde dio vuelta y no escucho mis palabras, ojala pudiera hacerle ver un día que no es mas sabio aquel quien habla mas fuerte, sino aquel que logra sostener la mirada.

Hoy vuelvo a esta biblioteca, para dejar en ese pequeño librillo gastado titulado “Colombia” el siguiente mensaje que de seguro leerá.


Mi utopía es escalable
Mis miedos soportables
Mi optimismo renovable
No pierdo tiempo dado vuelta a una idea
Solo la alimento

Y si mis sueños penden de un hilo
Es porque los sueño despierta
Lo que hace de ese pequeño hilo
La estructura mas fuerte

Es cierto que he caido
Pero mis pies han sido fuertes
Mis manos astutas
Mis argumentos poco idiotas
Y ya pude levantarme

Cuando vuelvas cobarde
Ten cuidado al hablarme
Que aunque parezca ingenua no soy estupida
Y no me hago débil al ser sensible

Nunca jamás volvió a pasar
Que aquella volviera a suspirar
Después de cada beso esperaba amor
Después de cada abrazo esperaba cariño

Nunca jamás volvió a pasar
Que su alma se sintiera plena al respirar
Después de cada palabra esperaba ternura
Después de cada caricia esperaba plenitud

Nunca mas volvio a pasar
Que su sonrisa brillara sin parar
Después de cada mirada espero sinceridad
Y después de tanto solo espero algo especial

No son mentiras sus mentiras
Mi memoria no es un juego
Y mi preocupación no vino en vano
No son mentiras sus mentiras
Yo lo revivo en mi recuerdo
Que ayer me ofendieron, insultaron, persiguieron
No son mentiras sus mentiras
Pues yo no olvido lo ayer leído
Hoy no vengan con un abrazo entre hermanos
Pues no termina el infarto al que me han llevado
No son mentiras sus mentiras
Y los que me acompañan no son pendejos
Que con risitas y palabras en los medios
No borran lo que ayer dañó esta casa.

Talento

La miro y por su mente solo paso la idea loca de tenerla en sus brazos para hacerla suya. Tomo con poca precaución ese último trago donde ahogo la vergüenza y tomo impulso a levantar su escuálido cuerpo de la silla para caminar en dirección a la tarima. Ella, la guitarra café que por horas había amenizado el bar de luz tenue, se encontraba descansando al lado de la pequeña butaca donde antes estaba sentado un hombre cualquiera que había optado hacer de ella una cualquiera.

El bar se prendió burlas que hacían referencia a aquel enclenque que creían borracho. Sin poner mucha atención a lo que sucedía a su alrededor, sentado ahora en la butaca, con la mirada perdida en algún lugar entre la guitarra y el, comenzó a afinarla. Después de algunos minutos ella ya estaba preparada para que hiciera de ella la mejor melodía.

Su mano izquierda jugaba con su brazo izquierdo inventando acordes suaves, concretos y ordenados. Con su mano derecha sus cuerdas hacia bailar fusionándose en una mezcla perfecta. Ella en sus piernas, el se balanceaba con suavidad, ella se dejaba llevar en su abrazo, fue como entonces alcanzaron la perfección que hizo levantar al bar en aplausos.

No hicieron falta las palabras, la canción de por si era grandeza, clavada en la mente de los espectadores, gravada en las manos de el, y en ella el persistente deseo de no volver a ser una cualquiera.

No necesito amarte para decirte que hoy te quiero a mi lado

No necesito planear una vida entera a tu lado para decirte que hoy espero verte

No necesito imaginarte presente por el resto de mis días para decirte que estoy imaginando tu sonrisa

No necesito creer que eres el príncipe perfecto para saber que hoy un beso tuyo seria perfecto.